Cuando tenemos dificultades para
expresar algo podemos intentar hacerlo de manera figurativa, con una imagen
gráfica o realizando una puesta en escena que nos permita comunicar lo que
tenemos en mente. Conocemos la expresión que una imagen vale más que mil
palabras, en este sentido el arte puede sernos de mucha utilidad para informar de
un tema en particular a un público objetivo.
Por ejemplo el Guernica de Picasso le transmite a una gran masa que
trascendió fronteras el sufrimiento del ser humano en consecuencia de un hecho
violento, también podemos ver manifestaciones de este tipo en el arte vivo,
donde artistas a través de instalaciones
o performances le transmiten al
público de manera directa, en ocasiones utilizando solamente su cuerpo una
serie de sensaciones que el público difícilmente olvida. Incluso algunos
artistas involucran al público en su obra haciendo del acto artístico algo
mucho más significativo.
Con el arte podemos transmitir un pensamiento social, político y crítico extrayendo ese ser espontáneo que se
ve limitado por la vergüenza de expresar sus emociones frente a la sociedad,
venciendo tabúes puestos o autoimpuestos, venciendo también nuestro temor e
inseguridad.
El arte permite que compartamos ideas y experiencias, abre el debate para discutir temas
diversos que nos permite generar dudas e interrogantes y nos empuja a buscar
respuestas.
Por lo tanto la intención es
motivarlos a que observen su entorno local o global y que este proceso los
impulse a buscar una manera de expresar esas ideas, pensamientos y emociones a
través del arte y que como resultado de ese ejercicio su pensamiento influya positivamente en la conciencia
de sus observadores.